Se trata de empresas, en su mayoría familiares y de autónomos, que a causa de la crisis del Covid-19 y la paralización del sector turístico, no tiene visos de remontar de cara al verano. Desde Direbús, Angel Martínez lamentaba que el Gobierno no se haya preocupado de un sector que tiene que seguir pagando sus impuestos y asumiendo costes sin tener ingresos. Destaca que la crisis sanitaria les ha dejado en el dique seco, mientras las administraciones han dejado de lado a un sector que podrá recuperarse, como mínimo hasta la primavera del próximo año, y para entonces, aseguran, muchas empresas habrán tenido que cerrar.
La movilización se ha llevado a cabo en otras 20 provincias de España bajo el lema “Salvar el Autocar” y “También somos Turismo”. Los autobuses de las distintas empresas han hecho sonar el claxon a lo largo del recorrido que ha finalizado en la Subdelegación del Gobierno de León, para manifestar su repulsa y la falta de soluciones y medidas por parte del Gobierno, hacia este sector del transporte discrecional y turístico de viajeros por carretera, que necesita ayudas directas. Este sector, indignado por los agravios comparativos a los que viene siendo sometido durante décadas, con relación a otros segmentos del transporte terrestre, está conformado en más de un 90% por pequeñas y medianas empresas, gran parte de ellas de carácter familiar, que muchas de ellas o la gran mayoría no podrán afrontar el futuro más inmediato de sus negocios.