El viceconsejero de Medio Rural atribuye el agravamiento de la crisis que está llevando al abandono y el cierre de explotaciones de la región, muchas en la provincia de Ciudad Real, a la guerra en Ucrania. Y, en este contexto, ha señalado las ayudas aprobadas por el Gobierno a nivel nacional.
Portillo reconoce que existen otras cuestiones que afectan a quienes se dedican a esta actividad, como la incidencia de la tuberculosis caprina, aunque señala que el Ejecutivo regional ha tenido en cuenta a los perjudicados con ayudas específicas.
En cualquier caso, el viceconsejero defiende la necesidad de este tipo de controles, como única forma de poder acceder luego a los mercados internacionales con los productos alimentarios castellanomanchegos, ya que se exigen una serie de certificaciones de estar libre de este tipo de enfermedades.
En cuanto a la falta de rentabilidad de los ganaderos o las ventas a pérdidas, Agapito Portillo afirma que, frente a una situación de gran complejidad, donde están presentes diferentes factores e intereses, se han producido avances muy importantes y se han creado herramientas para el futuro del sector ganadero. Como la Ley de la Cadena Alimentaria, a nivel nacional, o el Observatorio de Precios en Castilla-La Mancha.