El 4 y 5 de mayo en Tamajón

Mercado Medieval

Llega ya a su XXV edición.

Félix García Pérez

Guadalajara | 26.04.2024 14:39

Mercado Medieval
Mercado Medieval | onda cero

Los próximos días 4 y 5 de mayo el Mercado Medieval de Tamajón va a cumplir su XXV edición. Será, por lo tanto, una edición especial, en la que el aniversario estará presente en cada momento de la celebración.

El Mercado comenzará con un momento especial, haciendo gala de la proverbial solidaridad de Tamajón. A las once de la mañana, del día 4 de mayo, se recibirá a los participantes de la 'Marcha Solidaria por Noelia', vecina de Tamajón. Noelia Moya es una niña de doce años afectada por una enfermedad rara, el Síndrome CTNNB1.

Poco después de que llegue la marcha solidaria a Tamajón, comenzará el Mercado Medieval con la decoración que va creciendo y extendiéndose por más lugares del pueblo, incluyendo pendones representativos de los escudos de los apellidos agalloneros más tradicionales encontrados en los archivos municipales desde el siglo XVIII, tales como Montúfar, Gamo, Lozano o Esteban.

Los niños van a ser protagonistas especiales de la celebración. En primer lugar, podrán asistir a la forja de una espada, que llevará a cabo, nada más terminar el pregón, el artesano Michel Redrado. Y, a continuación, se enfrascarán en una batalla medieval infantil participativa, con catapultas a tamaño real, que dispararán… globos de agua.

Ya por la tarde tienen otro espectáculo participativo. En este caso, se trata de la “Búsqueda del tesoro de los Godos”. Cuenta la leyenda que cuando fueron derrotados, su jefe escondió todo su oro en las inmediaciones de Tamajón. Por eso, los más pequeños, guiados por los monitores de Professional History, deberán encontrarlo, convertido en monedas de chocolate.

Como en todas las ediciones anteriores, en esta también están previstos talleres, que cada año varían su contenido y condición. En esta ocasión, se va a poner en marcha un taller de cartografía en el Aula Gótica, una antigua escribanía donde los monjes calígrafos enseñarán a los más pequeños a trazar las fronteras de los reinos en la Edad Media, además de enseñarles a escribir con la caligrafía propia de la época.