Cuenca | (Publicado 06.08.2020 09:58 )
Su cabaña ganadera tiene décadas de historia. Está inscrita en el libro genealógico de la raza manchega.
Ha pasado de padres a hijos durante tres generaciones.
En una entrevista en Onda Cero Cuenca, Navarro, de Asaja de Cuenca, lamenta que ya no tenga relevo generacional. Sus dos hijos quieren dedicarse a otra cosa.
Por eso busca algún joven ganadero que se quiera incorporar a la ganadería.
Dispone de una nave para albergar a mil ovejas y un cercado de 25.000 metros cuadrados.
Sin embargo, reconoce que no son buenos tiempos para dedicarse a la ganadería.
El confinamiento agravó los problemas del sector. Estuvo casi dos meses sin encontrar compradores. Finalmente vendió algunas a mitad de precio.
“Si no me las compra nadie que quiera seguir la explotación tendré que venderlas para el matadero”, lamenta Navarro, quien critica las pocas ayudas del Gobierno central a un sector del que viven cientos de familias en Castilla-La Mancha.
Las vende, "a la carta", a 90 euros cada una.