Este viernes se han reabierto todos los accesos al río Júcar a su paso por la capital, que ha llegado a rozar un caudal de 300 metros cúbicos por segundo esta semana, pero que ya se ha normalizado a unos 68 metros cúbicos por segundo, según la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).
Esta semana tuvo que acotarse la zona del Recreo Peral y el recinto ferial, en la confluencia con el río Moscas por las inundaciones.
Este jueves, el La Toba, en Uña, concluía el desembalse extraordinario por coronación tras superar su capacidad y estar desbordado durante varios días.
La presa, además de adquirir un color amarronado esta semana, ha recibido a algunos valientes piragüistas, quienes han surcado las aguas de este embalse conquense.