Así lo ha acordado la Junta Local de Seguridad, para evitar "conductas de riesgo de transmisión de COVID-19 y situaciones susceptibles de alterar la pacífica convivencia".
El dispositivo, entre el jueves 25 de marzo y el martes 6 de abril, contempla el cierre al casco antiguo, salvo para residentes, transporte público, vehículos de carga y descarga en el horario autorizado y usuarios de los aparcamientos públicos.
En concreto, entre el Viernes de Dolores de 19,00 a 23,00 horas; Sábado de Pasión de 11,00 a 23,00 horas; Domingo de Ramos de 10,00 a 23,00 horas; Lunes, Martes y Miércoles Santo de 11,00 a 15,00 y de 18,00 a 23,00 horas; Jueves y Viernes Santo, Sábado de Gloria y Domingo de Resurrección todo el día; y Lunes de Pascua de 11,00 a 15,00 horas.
Los accesos se cortarán en el Puente de la Trinidad, Puerta de Valencia y Plaza del Trabuco.
El acceso a la Plaza de Ronda por las Casas Colgadas se cerrará mediante barrera desde las 16,00 horas del Viernes de Dolores a las 22,00 horas del Domingo de Resurrección excepto para servicios de emergencia y usuarios autorizados.
Controles
Por otra parte, se incrementará la presencia policial para controlar el estacionamiento en zonas no habilitadas para ello en Camino de San Isidro, Camino de los Jerónimos, Carretera de Palomera, subida al Parador de Cuenca, Santuario de Las Angustias y Recreo Peral.
La información respecto a estas restricciones se puede consultar en la página web www.cuenca.es.
Cierre perimetral
Asimismo, habrá controles de verificación de procedencia en las entradas a la ciudad desde Valencia y Madrid debido al cierre perimetral de Castilla-La Mancha, y de circulación de personas en horarios no permitidos.
