La futura zona de bajas emisiones de Ciudad Real, que está previsto comience a funcionar a principios de 2025, se limitará únicamente a las zonas peatonales y de manera puntual se podrá extender a todo el espacio comprendido de rondas hacia el centro del municipio en el caso de que se superen los niveles máxima de contaminación.
Así lo ha avanzado el alcalde, Francisco Cañizares, durante una entrevista en Onda Cero Ciudad Real. De esta forma, la “Zona Ciudad Real Saludable” será bastante más reducida a la que había planteado el anterior equipo de Gobierno del Ayuntamiento.
El objetivo es que esta zona solo abarque las calles peatonales, “que ya tienen de por sí el acceso limitado a los vehículos”, señala el primer edil.
Y en el caso de que algún episodio de contaminación supere los niveles máximos permitidos, la zona de bajas emisiones se aplicará a todo el espacio comprendido entre rondas. Una situación, dice Cañizares, que no es nada habitual en Ciudad Real.
De hecho, y según las mediciones del aire de los últimos años, estas situaciones puntuales no se producen, y además si hay un incremento de contaminación no se debe al tráfico rodado, señala Francisco Cañizares, sino al funcionamiento de las calefacciones en invierno.