El jurado recibirá mañana el objeto del veredicto para su deliberación

Juicio en Ciudad Real: el albañil no murió por la caída sino por una cardiopatía, según el forense

La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha celebrado hoy la tercera sesión del juicio con jurado contra cinco personas acusadas de un delito de omisión del deber de socorro cuando un albañil perdió la vida tras sufrir una caída mientras trabajaba en una finca situada en Puebla de Don Rodrigo. El juicio ha quedado visto y el jurado recibirá mañana el objeto del veredicto para deliberar sobre la culpabilidad o la inocencia de los procesados.

José Luis Juárez

Ciudad Real | 30.03.2022 18:05

Hoy ha sido el turno para las pruebas periciales. El forense que practicó la autopsia del cadáver, Jesús María Martín Tabernero, asegura que la causa del fallecimiento del trabajador fue por un problema cardíaco y no por un traumatismo craneoencefálico.

Dice que la víctima tenía una herida estrellada en la cabeza, debido a la caída que sufrió, pero no era mortal. También afirma que el albañil primero tuvo un shock cardiogénico y después cayó al suelo, produciéndose la herida en la cabeza.

Según el forense, el fallecido sufría una enfermedad cardíaca grave que puede ser hereditaria y que tal vez ni siquiera lo sabía él.

Por su parte, los facultativos del instituto de toxicología han declarado que el trabajador no tenía un trauma craneal, también aseguran que la causa de la muerte fue una patología cardiopulmonar y que en la sangre no se encontraron restos de alcohol o drogas.

CONCLUSIONES FINALES

En sus conclusiones finales, la acusación particular, que representa a los padres del fallecido, ha introducido una leve modificación, ya que ha retirado la acusación a uno de los imputados, que tendrá por lo tanto una sentencia absolutoria. Además, mantiene la calificación principal para los otros cuatro acusados pero establece como alternativa el delito sobre aquel que estuviera impedido de prestar socorro y no demande con urgencia auxilio ajeno.

Por su parte, el Fiscal mantiene la petición absolutoria para los acusados, lo mismo que las defensas, que además han pedido que la acusación particular sea condenada a pagar las costas del juicio.