CONTROL SANITARIO
Efectivos de la Guardia Civil de Albacete han intervenido 177 kilos de picadura de tabaco ilegal, que los destinatarios adquirían en un portal de anuncios de Internet y cuya distribución se realizaba a través de empresas de transporte de paquetería.
Se han formulado 80 denuncias por infracción a la Ley Orgánica 12/1995 de Reprensión del Contrabando y a la Ley 38/1992, de Impuestos Especiales, Impuestos Especiales, al encontrarse prohibida, tanto la venta como la compra de labores de tabaco por Internet u otros canales no autorizados.
Desde hacía unas semanas, la Guardia Civil albaceteña había tenido conocimiento de la remisión de pequeños paquetes, con distintos pesos, que contenían distintas cantidades de picadura de tabaco, valiéndose para efectuar el transporte de los servicios de empresas de paquetería, las cuales desconocían el contenido de los mismos.
Desde un primero momento la Benemérita detectó como en estos paquetes, el remitente indicaba datos falsos para evitar ser localizado en caso de interceptar los envíos, comprando los destinatarios la picadura de tabaco, para su autoconsumo, a través de Internet.
80 PAQUETES INTERVENIDOS
La Guardia Civil ha intervenido 80 paquetes de distintos pesos y tamaños que contenían en su interior bolsas transparentes de picadura de tabaco, de 1 kilo de peso cada una, careciendo de cualquier tipo de documentación o de las precintas intracomunitarias.
Dichas intervenciones del género estancado, se han realizado en estrecha colaboración con la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera de la Delegación de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria de Albacete.
CONTROL SANITARIO
El consumo de la picadura de tabaco intervenida puede conllevar un serio riesgo para la salud pública, al no tenerse constancia de que haya pasado ningún control sanitario que la haga apta para el consumo humano.
La Guardia Civil recuerda que el tabaco es un producto estancado, por lo que su venta está restringida a la red de expendedurías de Tabaco y Timbre, a los puntos de venta con recargo, o a través de máquinas expendedoras de establecimientos autorizados, estando prohibido su venta a través de Internet u otros canales distintos.