La experta en Gestión Forestal, Vanesa Tilán, explica en Onda Cero Cantabria que se debería actuar ya para conseguir recuperar lo perdido del Bosque de Secuoyas de Cabezón de la Sal. En ‘Más de Uno Cantabria’, Tilán cree que sí se debería acotar su uso después de realizar un estudio de la zona.
“¿Acotar el uso?” se pregunta Tilán, “sí, como se ha acotado el uso en las Cuevas de Altamira donde hay un uso máximo”. La experta explica que “se podrían hacer caminos donde pasear” por ellos “a través de pasarelas donde no va a dañar las raíces ni compactar el suelo”.
Durante una entrevista en ‘Más de Uno Cantabria’, explica que si no se actúa ya, se perderá una de las joyas de Europa de esta especie. Añade, además, que cerrar el parque hasta que se recupere lo perdido sería una de las últimas opciones.
Regular el bosque para frenar su deterioro
A principios del mes de octubre, la consejería de Turismo y el alcalde de Cabezón de la Sal mantuvieron una reunión en la que hablaron de trabajar de forma conjunta para buscar una solución al deterioro que está sufriendo el bosque de Secuoyas, fruto de la excesiva afluencia de visitantes.
En esa reunión, el ayuntamiento pidió al Gobierno ayuda para frenar "los desperfectos que ocasionan los más de 200.000 visitantes que anualmente acceden a este pequeño espacio natural, sin ningún tipo de vigilancia y control de acceso".
Según el alcalde, Óscar López, son muchos los árboles que presentan grabes daños en su corteza, "porque son muchos los visitantes que se las llevan como recuerdo", y hay ejemplares con las raíces al aire por la erosión que provocan estos miles de personas pisando día a día sobre la superficie del bosque.
Acotar el bosque
Una de las soluciones de las que se habló en esta reunión entre ambas instituciones pasaba por ejecutar el vallado perimetral de la zona, se acoten los árboles para que los visitantes puedan recorrer el espacio sin dañar este arboreto de secuoyas, que es único en Europa.
Monumento Natural desde 2003
El bosque de Secuoyas fue declarado en 2003 como Monumento Natural por parte del Gobierno de Cantabria, por lo que forma parte de la red de Espacios Protegidos de Cantabria. Un espacio que tiene 840 árboles de secuoya.
