Según el presidente de del gremio de lavanderías y tintorerías de PIME Baleares, Bernardí Salom, las lavanderías industriales han visto reducido su volumen de negocio debido a que los hoteles dejan de contratar servicios externos por el bajo poder adquisitivo de los turistas. Para la rama de las lavanderías particulares la situación es mucho más crítica porque la gente compra ropa más barata y por lo tanto, la gente prefiere comprar de nuevo a contratar servicios de tintorerías. Bernardí Salom asegura que el sector necesita reinventarse para sobrevivir. Actualmente existen entre lavanderías industriales y particulares algo más de cien empresas en Baleares pertenecientes a este gremio.