Medio ambiente

La UIB propone 69 medidas concretas para frenar el cambio climático en Baleares

Algunas medidas son incrementar los espacios naturales y la eficiencia en el consumo del agua, reducir la demanda de energía, fomentar la movilidad sostenible o promover el consumo de productos locales.

Europa Press

Illes Balears | 08.11.2021 11:39

Temporal de viento en Mallorca
Temporal de viento en Mallorca | Agencia EFE

Un equipo de investigadores del Laboratorio Interdisciplinario sobre el Cambio Climático (Lincc) de la Universitat de les Illes Balears (UIB) ha publicado un estudio que propone un total de 69 medidas para reducir el impacto del cambio climático en las Islas, de las cuales 38 son de mitigación y 31, de adaptación.

Según ha explicado este lunes en rueda de prensa la profesora del departamento de Economía Aplicada de la UIB, Catalina Torres, la crisis económica y sanitaria "no es más que el último exponente de la fuerte crisis socioecológica actual", por lo que la implantación de esta medidas "es necesaria para antes de 2030".

Además, ha advertido que, "con la excusa de la recuperación, se está pulsando el acelerador para volver a la dinámica prepandemia, que es la que ha acelerado también los problemas ecológicos globales".

EL ESTUDIO

Concretamente, los investigadores han estudiado los cambios físicos que se podrían dar en las próximas décadas como resultado del cambio climático y han analizado su impacto sobre las variables ambientales, económicas y sociales. De todas ellas, se han seleccionado "las que eran más importantes para Baleares".

En esta línea, el profesor del departamento de Biología de la UIB, Miquel Ángel Miranda, ha explicado que los resultados desvelan "un aumento de la temperatura y del nivel del mar, la disminución de la precipitación media y el incremento de la evapotranspiración, las sequías y de la desoxigenación del océano como las principales amenazas para las Islas".

Por ello, algunas de las medidas que proponen son proteger y promover el incremento de espacios naturales, incrementar la eficiencia en el consumo del agua, reducir la demanda de energía en sectores de consumo, fomentar la movilidad sostenible o promover el consumo de productos locales para proteger la salud humana y económica sobre los impactos del cambio climático. Todo ello, han concluido, ayudaría a diversificar el modelo económico de las Islas.