El Juzgado de Instrucción número 2 de Palma ha dictado un auto por el que procesa a ocho personas por delitos de estafa agravada y pertenencia a organización criminal, por el presunto fraude masivo de intoxicaciones alimentarias en hoteles de Mallorca.
Se trata de ocho británicos que formaron una banda organizada dedicada a la captación de compatriotas turistas, que se alojaban en hoteles mallorquines en régimen de todo incluido, a los que convencían para que denunciaran intoxicaciones inventadas durante su estancia, para poder reclamar una indemnización económica en Reino Unido.
Según el auto de la jueza, de los casi 800 reclamantes de una cadena de Alcúdia, tan solo 38 solicitaron asistencia médica en el hotel durante sus vacaciones. De hecho, los hoteles habían pasado todas las inspecciones de salud satisfactoriamente.
El escrito apunta a que la banda supuestamente ofertaba la posibilidad de obtener hasta 40.000 libras de indemnización a los turistas que denunciaran. Denuncias que supusieron un perjuicio de más de 200.000 euros para los turoperadores y las propias cadenas hoteleras de la isla.