El presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares, Josep Oliver, se ha opuesto hoy a la aprobación del nuevo paquete de gravámenes que aprobará el Govern balear próximamente y ha llegado a decir: "Ya está bien de impuestos".
Con ocasión de una rueda de prensa, Oliver ha declarado que existen razones para pensar que parte del crecimiento económico de las empresas de Baleares de este año y del próximo "se irán en el pago de impuestos".
Oliver ha señalado que la aplicación de nuevos impuestos tienen "dos impactos", uno de carácter psicológico porque desincentiva las iniciativas empresariales y otro porque tiene un efecto directo negativo sobre la disminución del consumo al encarecerse los precios.
"La economía crece si crecen las empresas y esto las desincentiva", ha añadido Oliver, quien ha manifestado que la decisión de aprobar los impuestos es una decisión conjunta del Govern y del Parlament balear.
En concreto, sobre el nuevo impuesto de los rent a car, Oliver ha asegurado que es un "tema sangrante" porque "les pone fuera de la competitividad y porque un incremento de los precios es "muy determinante" en el sector turístico.
El Govern balear aprobará una reforma fiscal que supone la creación de cuatro tributos medioambientales sobre el consumo de envases no retornables de bebidas, el consumo de agua, los vehículos de alquiler y las grandes superficies, con los que se prevé recaudar inicialmente 70,5 millones de euros.
De todos modos, Oliver ha dicho que hasta que no se cierre el primer ejercicio, el ejecutivo autonómico no conocerá cuánto dinero conseguirá.