El portavoz del Govern, Rafael Bosch, ha afirmado este viernes que los servicios jurídicos de la comunidad "están revisando" si recurrir o no la decisión de la titular del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Palma de desestimar la demanda que el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, interpuso contra el secretario general de UGT Baleares, Lorenzo Bravo, por los improperios que éste profirió a raíz de unos polémicos acuerdos adoptados por el Ejecutivo balear.
Tras dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consell de Govern, Bosch ha indicado así que el Ejecutivo no ha adoptado todavía una decisión al respecto.
Asimismo, ha defendido que el caso lo sigan los servicios jurídicos de la comunidad y no sea llevado a nivel particular por Bauzá puesto que fueron "insultos" que se lanzaron al líder del Ejecutivo por su cargo como presidente.
Cabe recordar que la titular del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Palma desestimó la demanda alegando que "debe prevalecer el derecho a la libertad de expresión del señor Bravo sobre el derecho al honor del señor Bauzá", alega la sentencia.
La resolución da por tanto la razón al líder sindical al aseverar que las expresiones dirigidas por Bravo se produjeron en el marco de "una contienda político-sindical", lo que reduce su significación ofensiva, ya que fueron lanzadas "como crítica a la reducción de subvenciones y del número de liberados sindicales acordada por el Govern".
Tras conocer ésta, la portavoz del PP en el Parlament, Mabel Cabrer, consideró que Bauzá recurriría "seguramente"; mientras que Bravo, por su parte, confió este jueves en hacer "borrón y cuenta nueva" por lo que emplazó al presidente a tomar un "pa amb oli" con él.