El Día Internacional de la Mujer Trabajadora se celebra este jueves 8 de marzo en España con un total de 47.815 mujeres en paro, un 11,4 por ciento más que hace un año. Por ello, asociaciones de mujeres y expertos coinciden en que las medidas laborales que se apliquen en adelante se hagan conforme al principio de igualdad de oportunidades para que las desempleadas tengan más posibilidades de acceder al mercado laboral.
En declaraciones a Europa Press, la presidenta de la Fundación Mujeres, Marisa Soleto, pide a la clase política que "afine los análisis" y estudie "bien" hasta qué punto las medidas adoptadas en los últimos años han contribuido a una mejora de las relaciones laborales del colectivo de mujeres.
"La crisis nos ha igualado, pero los beneficios de la recuperación económica en España se tienen que distribuir equitativamente porque esto va a ser beneficioso para el mercado laboral", asevera. Sin embargo, advierte de que "no parece" que la reforma laboral propuesta por el Gobierno vaya a tener un impacto positivo en las mujeres.
A su juicio, "gran parte" del paquete de las medidas sobre las relaciones laborales añaden "rigideces", que "dificultan las posibilidades de participación de las mujeres en el mercado laboral, y lo hacen indiscriminadamente, incluyendo la modalidades de contratación, como el contrato a tiempo parcial".
En cualquier caso, afirma que "el mejor deseo" para el 8 de marzo es que se "equilibren" las posiciones de los hombres y las mujeres en las relaciones laborales y que este principio se incorpore al real decreto a través de su trámite parlamentario.
Respecto a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres a la hora de optar a un puesto de trabajo, la profesora titular de Psicología en el Trabajo de la UNED Amparo Osca indica que con la crisis esta premisa se va a resentir. Según explica, la situación económica condiciona los procesos de selección de personal en perjuicio de las mujeres.
Osca señala que los estereotipos están condicionando estos procesos, en la medida que los puestos de mayor importancia o jerarquía en la organización son ocupados por hombres porque "tradicionalmente se ha pensado que las características asociadas al puesto de trabajo son propias de su sexo".
Según esta experta, la crisis va a favorecer aún más esta forma de pensar, porque hay muchos más candidatos para pocos puestos y las empresas se van a dejar llevar por estos estereotipos y prejuicios, "acrecentando los problemas de discriminación de las mujeres en el mundo laboral".
"En lugar de hacer un proceso riguroso y serio porque hay muchos candidatos, va a ocurrir lo contrario y, en igualdad de condiciones, se va a contratar antes a un hombre que a una mujer", advierte.