JUZGADOS

El detenido con 140 kilos de explosivos saldrá de la cárcel para realizarse las pruebas médicas

La última vez que vio a su defendido señaló que éste se encontraba "tranquilo" y éste le dijo que "el fin de semana" había "podido ver la información" y que consideraba "que se ha exagerado mucho y se han dicho cosas que no son ciertas".

ondacero.es

Baleares | 10.10.2012 00:00

El juez del Juzgado de Instrucción número 9, Enrique Morell, ha admitido la solicitud del informe médico de Juan Manuel Morales Sierra de 21 años, que ha sido detenido por tener 140 kilos de explosivos y tentativa de estragos debido a que presuntamente quería atentar contra la Universidad de las Islas Baleares (UIB), por lo que éste deberá ser excarcelado para ser sometido a pruebas psicológicas y psiquiátricas.

Según ha informado a Europa Press su abogada de oficio, Agustina Alonso, este lunes se solicitó la prueba en el Juzgado de Instrucción número 9, que lleva el caso y ésta ha sido admitida por lo que la clínica forense, en función de su calendario, establecerá "en breve" la fecha del examen para determinar si su cliente padece o no algún tipo de trastorno ya sea mental o de la personalidad.

Alonso, que actúa en calidad de abogada de oficio, ya explicó que los resultados de las pruebas podrían determinar si se le aplica "algún tipo de atenuante si se le diagnostica una patología leve y si es grave, podría suponer un eximente o la inimputabilidad".

La última vez que vio a su defendido señaló que éste se encontraba "tranquilo" y éste le dijo que "el fin de semana" había "podido ver la información" y que consideraba "que se ha exagerado mucho y se han dicho cosas que no son ciertas".

La Policía Nacional detuvo el pasado 4 de octubre al joven quien --según explicaron en un comunicado-- estaba dispuesto a sembrar de bombas la Universidad de Illes Balears imitando la masacre de Columbine en la que dos jóvenes acabaron con la vida de 13 personas.

El arresto se produjo a las 10:30 horas de la mañana en Palma de Mallorca, justo en el momento en el que el arrestado recibía más de 140 kilos de explosivos que había adquirido a través de Internet.