La FSS CCOO ha censurado, en un comunicado, la situación "caótica" qué están viviendo usuarios y trabajadores del Hospital Comarcal de Inca tras la decisión de la dirección del cierre de 18 camas de medicina interna, un quirófano y una sala de radiología, mientras que los servicios de urgencia "están saturados", según informan en un comunicado.
CCOO critica que, además del cierre de estos servicios, la gerencia ha reducido en más de la mitad el personal habitual de los servicios de citación, telefonía, celadores, personal de enfermería y de radiología, entre otros y añade que la no sustitución del personal origina situaciones que vulneran la calidad de los servicios sanitarios.
Como ejemplo, el sindicato cuenta que en el turno de noche "sólo dos celadores" tienen que atender los servicios de todo el hospital o que si mientras un enfermero de quirófano atiende, por ejemplo, una cesárea, se da una intervención quirúrgica, el quirófano se queda sin "enfermera disponible", algo que afirman que es una situación "bastante habitual".
Otra situación que CCOO ha anunciado que están viviendo actualmente los trabajadores del hospital Comarcal de Inca, con la consiguiente repercusión para los usuarios, es la de la existencia de las llamadas "multisecretarias" y que consiste en una secretaria asignada a un departamento que tiene que hacerse cargo de varias especialidades "porque desde la gerencia no han cubierto al personal en vacaciones".
En este sentido, la FSS CCOO ha alertado de que la reducción del personal de citación origina "colas" de usuarios en los mostradores que esperan su turno para conseguir una cita, de igual manera que considera "inadmisible" el elevado tiempo de espera para realizarse algunas pruebas, como una TC, que va de cuatro a cinco meses o de una ecopgrafía, de siete a ocho meses, entre otros.
La FSS CCOO ha rechazado que en el periodo vacacional aún no se hayan cubierto las vacaciones "de una gran parte de los trabajadores del hospital".
Por ello, la FSS CCOO ha mantenido una reunión con la Dirección de Recursos Humanos del hospital en la que ha expresado su "indignación ante estas medidas de recorte económico que dejan entrever su despreocupación por las listas de espera", de las que la organización está segura que aumentarán a causa de la reducción de personal.
De igual manera, la organización ha afirmado que la reducción de personal, tanto sanitario como no sanitario por turno, mermará "la atención asistencial y cuidados que los pacientes requieren", puesto que reducir a la mitad el número de trabajadores "conlleva el doble de carga de trabajo y el consiguiente estrés" para los empleados, que según declaran, se ven "impotentes" para desempeñar sus funciones con "la calidad que los usuarios se merecen".
Por último, el sindicato ha añadido que "estas medidas de recortes, extrapolables al resto de los centros sanitarios de Baleares, no hacen más que agravar la deplorable situación de la sanidad pública balear".