Así ha quedado aprobado este miércoles en la Junta de Gobierno, que ha procedido a la reforma fiscal necesaria para no incrementar los impuestos en 2014, como tampoco se hará en 2015, tal y como ha avanzado el portavoz de Cort, Julio Martínez, en rueda de presa en la que ha informado de los puntos más relevantes de la reunión.
Martínez ha señalado que de esta forma se cumple con la promesa electoral adquirida por el alcalde, Mateu Isern, y se evita incrementar un 50% los impuestos municipales durante esta legislatura, tal y como propuso el anterior gobierno socialista, liderado por Aina Calvo.
Asimismo, ha indicado que el "ajuste de los gastos" ha hecho posible no tener que aumentar la presión fiscal. "El truco es no gastar, porque si gastas más de lo que ingresas, estás condenado a aplicar futuras subidas de impuestos", ha agregado al respecto.
De este modo, no subida al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), si bien será necesario aplicar una bajada del tipo municipal del 7,48% para compensar el aumento previsto por el Gobierno estatal.
Con todo, tampoco se incrementa el Impuesto de Vehículos, ni la tasa de tratamiento de residuos sólidos urbanos (Tirsu). Del mismo modo, quedarán congeladas las tarifas que afectan a otros servicios públicos, como las de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), o las que afectan a las instalaciones del Instituto Municipal de Deportes.
Por otra parte, el equipo de gobierno ha acordado la liquidación de la deuda pendiente de ejercicios anteriores con la Orquesta Sinfónica de Baleares 'Ciudad de Palma', mediante una modificación presupuestaria que permitirá hacer la aportación al Consorcio de la Música por un importe de 615.000 euros.
Con la decisión acordada de saldar deudas contraídas en la anterior legislatura, "el Consell de Mallorca, el Govern balear y el Ayuntamiento de Palma, estamos permitiendo que la Sinfónica tenga un futuro viable", ha defendido el portavoz de Cort.
Otro de los acuerdos revelantes de la Junta de Gobierno tiene que ver con una "importante inversión" que, según ha explicado Martínez, consiste en la adquisición de más de 250.000 metros cuadrados del bosque del Castillo de Bellver, que permitirá ampliar el "pulmón verde" de Palma mediante la expropiación de terrenos a particulares.
Se trata de una zona verde "prioritaria" para este Ayuntamiento, por lo que "nos hemos planteado ir pagando" por los terrenos, sin esperar a que el jurado de expropiación se pronuncie sobre el precio de venta, que valora en torno a los 14 millones de euros. En este sentido, ha explicado que la oferta del Ayuntamiento es de 4 millones de euros frente a los 21 millones que reclaman los propietarios.
En este punto, se ha mostrado "optimista" de cara a que este nueva zona verde quede incluida en el parque de Bellver antes de que termine la presente legislatura, dado que, al tratarse de una zona boscosa, no requiere de demasiadas obras adicionales de acondicionamiento, ha indicado.