La coalición Sa Unió, formada por el Partido Popular y Compromís per Formentera, logró un vuelco histórico en el Consell de Formentera.
Por primera vez en los últimos 15 años de predominio de la izquierda en la isla, la formación que encabeza Lorenzo Córdoba consiguió la mayoría absoluta y gobernará en solitario al obtener nueve consellers, tres más que en las elecciones de 2019.
La segunda fuerza política de la isla ha sido Gent per Formentera (GxF) de Alejandra Ferrer con cinco consellers y uno menos que en la pasada legislatura, seguida del PSOE de Ana Juan que ha pasado de cinco a tres representantes. Mientras, ni Vox ni el Partido Libertario consiguieron representación.