En una nota de prensa, Taboada cree que este hecho "da cuenta de la negligente gestión" del concejal de Seguridad Ciudadana, José Ramón Prado, y de la "falta de valentía" del mismo para "enfrentarse a la concesionaria del agua --Aqualia-- por los reiterados incumplimientos contractuales detectados gracias a los informes del responsable del contrato".
Taboada ha recordado que hace unos años se realizó una auditoría sobre el estado de los hidrantes en el municipio, a raíz del incendio en abril de 2016 en el que falleció un bombero en la calle Uría. En aquella auditoría se detectó que cerca del 90% de los hidrantes estaban inutilizados o en muy mal estado.
Tras este informe, explica, el Ayuntamiento sacó un contrato para hacer frente a este mantenimiento y control, aunque a juicio de Taboada esta es una obligación que Aqualia "se negó a cumplir durante años", y se pusieron en condiciones de funcionamiento y se señalizaron cientos de hidrantes que no lo estaban en el concejo de Oviedo.
"Aun así no se les ocurrió pensar que, al lado de los monumentos declarados patrimonio de la Unesco en el Naranco, debía de haber un hidrante hasta que se pusieron en peligro hace unos días, lo que da cuenta de la negligente gestión del citado concejal", ha subrayado.
"Las denuncias de Bomberos y los informes de fiscalización del contrato deberían dar lugar a una auditoría del contrato del agua de una vez por todas, pues estos incumplimientos reiterados y facturas engordadas deberían dar lugar cuando menos a sanciones, sino a una posible resolución de un contrato que mantiene la gestión del agua pública en manos privadas por 75 años", ha zanjado.