Se acabó la espera. Jon Pérez Bolo será el entrenador del Real Oviedo en la próxima temporada. Todas las partes implicadas en la negociación llegaron a un acuerdo en la jornada de ayer y el técnico estampó su firma en un contrato que le ligará a la entidad carbayona para la próxima temporada.
Bolo posee una dilatada trayectoria como futbolista y llegó a jugar en Primera División con Athletic de Bilbao y Rayo Vallecano y también militó en Hércules, Nástic, Numancia y Barakaldo. Una vez colgadas las botas, el vizcaíno fue director deportivo del propio Barakaldo y se estrenó como técnico en el Arenas de Gexto.
Sus buenas campañas le permitieron llegar al banquillo de la Ponferradina en 2018 y en su primera campaña logró el acenso a Segunda A y ha conseguido consolidar al conjunto berciano en la categoría en las tres últimas campañas. Al término del pasado curso, anunció su intención de renovar en El Toralín y ahora le llega la oportunidad de dirigir al Real Oviedo, en sustitución de José Ángel Ziganda, con el que compartió vestuario en el Athletic y al que le une una estrecha amistad.
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EQUIPO TÉCNICO
Bolo no llegará solo a Oviedo. Junto a él se incorporan al cuerpo técnico, Pablo Lago, como segundo entrenador. El vegadense jugó en las categorías inferiores del conjunto azul y llegó al Vetusta y también pasó por el Sporting, hasta que coincidió con el técnico bilbaíno en el rayo donde forjaron amistad que cristalizó con su incorporación al equipo de trabajo de Bolo y ahora vuelve a Oviedo.
También habrá cambio en la preparación física del primer equipo azul. Alberto Martínez deja el equipo y su puesto podría ser cubierto por Pablo Santis, que ya trabajó con Bolo en la Ponferradina. Las novedades se completarían con la llegada de Asier Díaz Bonilla, que trabajaría como analista. Sergio Segura se mantiene como entrenador de porteros.
En apenas tres semanas, el equipo deberá iniciar los entrenamientos de pretemporada en El Requexón y para esa fecha deberán estar resueltas algunas situaciones como la posible continuidad o no de Borja Sánchez y Joan Femenías y la intención del club es tener claro si jugadores como David Costas o Borja Bastón van a formar parte de la plantilla.
A partir de ahí, comenzarán los retoques que necesitará el equipo que precisa la llegada de dos laterales, un central, un mediocentro y también reforzar el ataque en sus bandas y en el frente del ataque. Muchos trabajo en la mesa de Tito Blanco, que confía en no sufrir sorpresas desagradables en forma de salidas, más allá de las que el club vería con buenos ojos, como puede ser el caso de Jirka, sin apenas protagonismo en el pasado campeonato.
