El Secretario General de CCOO señaló que en Asturias se encienden las alarmas porque la situación no acaba de remontar, acumulando crisis tras crisis. Es la conclusión que saca del Informe “Asturias 2022” que elabora el sindicato. Jose Manuel Zapico incidió en las incertidumbres que arroja la economía de guerra que puede llevarse por delante a gobiernos por la elevada inflación y en Asturias no hay una transición justa para la industria.
Los datos del informe no son buenos. La previsión para este ejercicio es que la economía asturiana crezca por debajo de la media nacional, con un PIB que llegaría al 3,4%. El mercado laboral está lastrado por el paro y presenta problemas estructurales difíciles de superar toda vez que el empleo se basa en sectores poco intensivos en conocimiento, solo ¼ de los contratos son de alta cualificación y así es imposible el retorno y la atracción de talento. El 42,7% de los empleados tiene una cualificación muy superior a la de su puesto de trabajo.
Los salarios mejoraron el año pasado el 2,9% pero no mitigan la caída del poder adquisitivo, que se redujo un 7% a causa de la inflación. La remuneración más alta se da en la industria y la construcción, mientras que la más bajos está en el sector Servicios, que además está casi un 2% por debajo del promedio nacional.
La tasa de actividad de Asturias es muy baja. La temporalidad ha mejorado con la reforma laboral. Un dato llamativo del informe es que gracias al plan de choque de la Inspección de Trabajo afloraron 3.500 contratos que eran temporales. También es significativo que en Asturias gracias a los ERTES se salvaron 76.000 puestos de trabajo durante el Covid, gran parte entre los asalariados de la hostelería, porque el 51%, estuvo regulado durante la pandemia.
El Secretario General de CCOO reclamó a la FADE que mueva ficha en el sector de hostelería en Asturias para abrir las negociaciones del convenio colectivo que lleva congelado varios años. José Manuel Zapico pidió a OTEA que no se esconda, que no faltan trabajadores sino salarios decentes para un colectivo muy precarizado y que la patronal debe mover ficha.