La COVID ha hecho que este año las luces se encendieran sin acto oficial. Solo una cita simbólica para evitar aglomeraciones y mantener la distancia de seguridad que nos está marcando en nuestro día a día.
Para adaptarse a las restricciones actuales, la iluminación se apagará pasados unos minutos de las 22:00 horas. Porque en Asturias el ‘toque de queda’, las restricciones de movilidad, se mantienen entre las 22:00 y las 06:00 horas.
Está por ver que ocurrirá en los días señalados de las fiestas: 24 de diciembre, 31 de diciembre y 5 de enero. Todo depende de las normas que se aprueben para esas jornadas.
43 personas de la empresa Germán Vizcaíno han trabajado en el diseño, planificación e instalación de los adornos. Un trabajo que se adelantó varias semanas por si se decretaban nuevos confinamientos que condicionaran el calendario.
Repartidos por las ciudad hay elementos 3D a pie de calle. Entre ellos un ‘photocall’ para hacer todos los ‘selfies’ que se nos ocurran. La novedad es un ‘skyline’ de Gijón.
Un árbol de luz de 22 metros de altura, en forma de cono, está instalado en El Náutico. Genera efectos diversos con sus 20.000 puntos de luz. Un juego de colores, formas y efectos a los que acompaña la música que se puede escuchar en su interior.
Los equipamientos culturas siguen cerrados a día de hoy. Por eso no habrá Belén Monumental en el Jardín Botánico Atlántico. Un belén histórico, con piezas a tamaño natural, que podría instalarse en un local comercial en el centro de la ciudad.
Gijón ya ha confirmado la visita de los Reyes Magos. Lo que no está clara aún, es su agenda para el 5 de enero. Melchor, Gaspar y Baltasar quieren adaptarse a las restricciones sanitarias y su servicio de protocolo no ha querido confirmar detalles. Lo hará cuando las normas sanitarias, a nivel nacional y regional, estén claras.
