La última detención ha sido esta madrugada alrededor de las 2.30 horas en el entronque de las calles Pérez de Ayala con Echegaray. Una patrulla observó un vehículo detenido ante un semáforo en fase verde. El coche, emprendió la marcha a gran velocidad, circulando por Severo Ochoa y Eleuterio Quintanilla, donde comenzó a frenar de forma brusca sin causa aparente. Tras interceptar el vehículo e iniciar conversación con el conductor, los agentes observaron que este se encontraba claramente bajo los efectos de bebidas alcohólicas. En la prueba quintuplicó la tasa máxima permitida.
El hombre, de 51 años y vecino de Gijón, fue inmediatamente detenido por un presunto delito contra la seguridad vial. Ya había sido detenido por la Policía Local hasta en tres ocasiones durante los últimos cinco meses por los mismos motivos, dos de ellas durante el pasado mes de febrero. De hecho, pesan sobre él nueve suspensiones temporales y cinco pérdidas de vigencia del permiso de conducir. Debido a esto, al conducir sin permiso de conducción, se le investiga también por un delito contra la seguridad vial.