Moro confirma que había quejas contra el capataz señalado desde hace muchos años, pero no se concretaban en denuncias formales porque los afectados "no se atrevían". De hecho, apunta, el único trabajador que decidió denunciar acoso laboral "fue represaliado".
Desde UGT aseguran que Emulsa tiene responsabilidad en lo sucedido. Antonio Moro asegura que él mismo puso en conocimiento del actual gerente, Alfonso Baragaño, lo que sucedía. Entiende que un cambio en la gestión de personal "es fundamental".
Esta tarde se ha convocado de urgencia al consejo de administración de Emulsa.