El Gobierno de Aragón ha tomado la decisión de confinar perimetralmente después de que el número de casos haya aumentado un 45% en la última semana hasta situarse en los 586 contagios por cada 100.000 habitantes. El decreto-ley, que aprobó el lunes el Consejo de Gobierno, les permite tomar decisiones inmediatas sin depender de los pronunciamientos judiciales.
Solo los sectores de Calatayud y Alcañiz están por debajo de los 500 casos por 100.000 habitantes. Los contagios en el ámbito rural se relacionan con la movilidad a las capitales, por eso el ejecutivo descarta confinar toda la comunidad. Salud Publica notificará hoy 910 positivos, la cifra más alta desde que empezó la pandemia. La consejera de Sanidad, Sira Repollés, explica que en parte se debe al aumento de la capacidad de control del coronavirus.
El aumento de contagios no se debe a brotes, que pueden ser fácilmente gestionados, sino a transmisión comunitaria por las actividades de ocio y reuniones familiares. Por eso el Gobierno aragonés no vería mal que se estableciese el toque de queda, aunque esa medida es competencia del Estado, y Aragón, directamente, no la solicitará en la interterritorial del viernes.
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