En una parcela de 100.000 metros cuadrados, construirán una planta en la que valorizarán cada año unas 140.000 toneladas de residuos orgánicos de la ganadería y del sector agrícola del entorno para generar 95 gigawatios por hora de biometano y fertilizantes.
Las obras comenzarán a finales de 2022 y la planta estará operativa en 2023 con una plantilla de 12 personas. Para agilizar los plazos, la inversión será declarada de Interés Autonómico por el Consejo de Gobierno.
La iniciativa se replicará en otras localidades
El proyecto también incluye un proceso de "upgrading" para convertir el biogás en biometano totalmente intercambiable con el gas que circula por la red. De esta forma se facilita su inyección y se obtiene un rendimiento económico de los residuos, permitiendo que tanto hogares, como industrias y vehículos puedan consumir energía proveniente de fuentes renovables.
El director de Innovación de Enagás, Jesús Gil, ha explicado que este proyecto denominado “Huesca Este”se exportará a otras partes del territorio para impulsar el aprovechamiento de residuos para generar energía. Por su parte, el alcalde de Vencillón, Ramón Capel, ha destacado la importancia de la nueva planta para apoyar al sector agroindustrial y asentar población.