El turismo extranjero supone solo el 7% de los viajeros de turismo rural por lo que en Aragón el cierre de fronteras ha afectado solo de manera residual. Los establecimientos del Pirineo se han consolidado como una de las zonas con más tirón, y aunque Gúdar-Javalambre y Albarracín han tenido mucho éxito, Matarraña ha sido en Teruel la zona con mayor demanda. A falta de contar con datos definitivos, el responsable de Faratur, Jesús Marco, señala que también han aumentado las pernoctaciones.