Previamente se ha llevado a cabo un trabajo de mapeo con todos los sectores implicados para poder poner en marcha este proyecto integral, que se desarrollará a lo largo de los tres próximos años con una inversión de 400.000 euros procedente del FITE.
Según ha explicado la consejera de Ciencia, Maru Díaz, "la idea es convertir a la provincia de Teruel en un gran laboratorio desde el cual se trabaje en proyectos innovadores que surjan de las necesidades planteadas por agricultores y ganaderos con el fin de adaptar sus demandas a la investigación".
La red empezará a trabajar el próximo mes de marzo y la previsión es que a lo largo del próximo verano se puedan lanzar cuatro proyectos piloto relacionados con la sostenibilidad, el medio ambiente y la economía circular.