Han remitido las lluvias y por fin se ha podido entrar en los campos y recorrer los caminos. Sena, la localidad más afectada, ha comenzado a valorar los daños y en infraestructuras municipales ascienden a entre 20 y 30 mil euros, principalmente en caminos que, además, se acababan de ejecutar.
Este vienes intentarán revisar el monte que hasta ayer estaba inaccesible, allí aprecian que la tormenta se ha llevado muros de piedra y enterrado completamente algunos caminos. La estimación de los daños supone para esta localidad de 500 habitantes, del 5% del presupuesto por eso, el alcalde Javier Felipe, ha avanzado la intención de solicitar la declaración de zona catastrófica o de pedir un paquete de ayudas para solventar dichos desperfectos.
La localidad va retomando la normalidad tras el paso de DANA, que según Felipe ha respondido a un episodio que generó miedo y preocupación entre los vecinos. Cabe recordar que en Sena, la borrasca Filomena les tiró un edificio municipal entero.