En 1982, Antonio Flamenco trabajaba como empleado de banca. Junto a su mujer, Concepción Lázaro, abrió una pequeña floristería en la Avenida América a la que llamaron El Rincón de las Flores. El negocio empezó a ir tan bien que un año después lo trasladaban a un local más amplio y convirtieron el que dejaba la floristería en una pequeña tienda de frutos secos.
Desde ese momento la historia se escribe en línea ascendente. Pronto llegaron más establecimientos y, después, otras adquisiciones como Gallo Rojo o Martín Martín para ampliar el negocio hasta convertirse en el grupo Flamen&Co. El fundador y director general de la marca, Antonio Flamenco, quien ha explicado que el concepto de negocio de El Rincón, ofreciendo una gran variedad de productos muy diferentes en una misma tienda, era inexistente en los años 80, lo que acabó siendo una de las clave para el éxito de la marca.
El Rincón facturó el pasado año 26 millones de euros; cuenta con 70 establecimientos, 65 de ellos en Zaragoza, uno en Huesca y cuatro en Madrid. Flamenco también subraya el compromiso social de la firma, que hace un esfuerzo para devolver a la sociedad parte de la confianza que reciben mediante acciones de responsabilidad social como su calendario solidario o diferentes patrocinios de causas sociales.