Guardia Civil Montaña

Rescatan en medio de la lluvia y el viento a un montañero exahusto

El montañero francés de 29 años se encontraba en un ibón de Benasque. Los efectivos del GREIM, que tuvieron que hacer frente a las malas condiciones meteorológicas, lo encontraron con síntomas de agotamiento e hipotermia.

Redacción

Huesca | 14.09.2022 14:17

Rescatan en medio de la lluvia y el viento a un montañero exahusto
Rescatan en medio de la lluvia y el viento a un montañero exahusto | Guardia Civil

La Guardia Civil tuvo que realizar el pasado martes una complicada operación de salvamento en medio de un fuerte viento, con lluvia y niebla, para socorrer a un montañero francés de 29 años al que encontraron con hipotermia y síntomas de agotamiento. Las malas condiciones meteorológicas dificultaron contar con el apoyo del helicóptero, y los socorristas tuvieron que cargar a la víctima a sus espaldas la mayor parte del trayecto.

La Guardia Civil recibió la llamada de socorro a las 10.45. Fue el 112 el que dio aviso al obtener una señal de emergencia de una baliza GPS. Esta se localizó en las proximidades del ibón Blanco de Literola. Al lugar acudieron la Unidad Aérea con base en Benasque con los especialistas del Greim de esa localidad. El helicóptero los tuvo que dejar a una cota de cerca de 2.000 metros, descendiendo en medio del viento y la lluvia. Pensando que el rescate se podría prolongar varias horas, y dadas las dificultades meteorológicas, realizó otro viaje con compones de refuerzo. Al iniciar la subida hacia las coordenadas que dio la radiobaliza GPS, la lluvia, el viento y la niebla eran cada vez más constantes, dificultando el ascenso, ya que se producían riachuelos por el sendero y tenían que seguir el track para no salirse del mismo.

Tras más de una hora de ascenso, próximos al ibón, daban voces y emitían sonidos con un pito por si contestaba el montañero. Finalmente, se le localizó, exhausto y con síntomas de hipotermia. Los agentes le quitaron la ropa que llevaba y le proporcionaron prendas suyas secas, además de agua y alimento. Procuraron estar el menor tiempo posible en la zona debido al mal tiempo. Antes de emprender la vuelta, llegan los otros dos componentes restantes del Greim, siendo de gran ayuda ya que a dicho montañero lo tuvieron que llevar en casi todo momento a la espalda, debido a la debilidad física a causa de la hipotermia que le impedía caminar por sí mismo. Tras pasar la cota de 1800 metros se contacta con la Unidad Aérea de Benasque, consiguiendo los pilotos realizar un apoyo parcial donde es introducida la víctima y un componente del Greim, aterrizando en la helisuperficie de Benasque donde es atendido por la médico del 061