La mayoría de esas compañías se concentran en el polígono industrial de Cuarte de Huerva. En La Cartuja ya se ha recuperado relativamente la normalidad, aunque empresas como BSH tardarán en reactivar su producción. Las grandes empresas tienen resortes para aguantar esta situación y seguir trabajando, por eso, las que peor lo están pasando son las pymes, la mayoría familiares, que tienen menos capacidad económica para garantizar su futuro. El presidente de la Federación del Metal de la provincia de Zaragoza, Benito Tesier, reclama la declaración de zona catastrófica para agilizar las ayudas e indemnizaciones. De momento, lo más inmediato es la limpieza y reparación de las instalaciones.
Daños enFuente de la Junquera
El Ayuntamiento de Zaragoza asegura que, gracias al incansable trabajo de las brigadas municipales, el camino de la Fuente de la Junquera ha logrado recuperar su estado normal, solo una semana después de la tormenta. El consejero municipal de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, ha explicado que, tras las labores de desescombro y limpieza, se ha reasfaltado un área de 1.000 metros cuadrados.
Trabajo en los talleres
Los talleres de Zaragoza siguen desbordados por la avalancha de vehículos que necesitan reparación, después de la tormenta que arrasó la ciudad hace una semana. La mayoría requieren arreglos en la carrocería y las lunas, por el granizo y los golpes, pero también hay muchos con fallos mecánicos en el motor, por la entrada de agua.
El miembro de la Asociación Atarvez y responsable de Automoción Miraflores, Eduardo del Molino, explica que en este taller prácticamente han doblado su carga de trabajo, en unas fechas en las que habitualmente ya hay un pico de actividad. Por eso, confía en la paciencia de los clientes.