Hace días que el Teatro Principal colgó el cartel de 'Entradas Agotadas' para los dos recitales del joven artista aragonés, que anoche ofreció el primero de los espectáculos con las canciones de su primer álbum, Recardelino, un localismo utilizado en Magallón y que su abuela le decía mucho de pequeño. A pesar de tratarse de un disco de debut y de su exultante juventud, asegura que no ha tenido que pelearse con nadie para imponer el estilo que quería darle a su disco.
Las influencias joteras están presentes a lo largo de varias canciones, con guiños como el fragmento de una conocida jota de picadillo que utiliza en Mis Tías, una canción que dedica a las trabajadoras del Colegio Mayor en el que residió durante su estancia como estudiante en Madrid.
Mención aparte merece La Magallonera, de la que ofrece una versión modernizada, aunque sobria e igualmente sobrecogedora. El artista, pregonero de las pasadas Fiestas del Pilar junto a Naiara Moreno, compañera y ganadora de OT, tiene por delante todavía la recta final de su gira, de la que le quedan trece conciertos. Aunque no ha adelantado nada concreto, sí que ha sugerido novedades interesantes para después del verano.