Gozarte

La genialidad de Goya en pequeños lugares de Zaragoza

Carlos Millán, de Gozarte, reivindica la figura del gran pintor aragonés en la capital aragonesa. La presencia de la obra de Francisco de Goya en Zaragoza es mucho mayor de lo que se piensa, más allá de la Basílica del Pilar.

Lourdes Funes

Zaragoza | 10.05.2024 15:11

Nos adentramos en el seguimiento de la obra de Francisco de Goya en Zaragoza a través de su biografía, como cuenta Carlos Millán, de Gozarte. El primer documento relacionado con Goya es su partida de nacimiento en Fuendetodos y el segundo es la confirmación en la parroquia de San Gil a los cinco años. Y luego se le sigue la pista con el documento de matriculas de cumplimiento cuaresmal porque comulgar era obligatorio y los párrocos llevaban el registro de quienes comulgaban y permite saber donde viven los Goya en cada momento.

Después de que su padre lo metiera como aprendiz en el taller de Luzán, se marchó a Italia. Ahí participó en un concurso en Parma y le dan un certificado y se vuelve a Zaragoza porque se entera que van a hacer obras en El Pilar. Y se presenta para realizar el coreto de la Santa Capilla, trabajo que le dieron cuando demostró que podía pintar al fresco con un medallón que realizó en el convento de los Jesuitas de Alagón, boceto que se conserva en el Museo Goya Ibercaja.

Tras este trabajo, pintó la Cartuja del Aula Dei. Una obra que Carlos Millán de Goazarte asegura que es una maravilla poder verlas, no sólo la cartuja sino también la iglesia. Se cree también pintó una capilla que estaba en el Palacio de Sobradiel, actualmente el colegio de Notarios en la plaza del Justicia de Zaragoza. Ahora están en el Museo Ibercaja, parte en el Museo de Zaragoza y otra parte están dispersas

Bayeu le convence para que se vaya a Madrid y ahí entra a la fábrica de tapices y cuando Bayeu regresa a Zaragoza para pintar las pechinas del Pilar, se trae a uno de sus hermanos y a Goya, pero al final solo pinta la de Reina de los Mártires tras un malentendido con el clero.

De vuelta a Madrid

Se vuelve a Madrid y Carlos Millán nos habla de la leyenda que giró en torno a la figura de Goya y de la enfermedad que le entró. Se cree que pudo ser saturnismo por el contacto permanente con el plomo de las pinturas. Va a Cádiz para cuidarse y ahí se queda sordo. Es el momento en el que le cambia el carácter y, además de vivir en la calle desengaño, le lleva a pintar los Caprichos

Todas las series de grabados de Francisco de Goya están en Zaragoza. Y después recibe un encargo de Ramón de Pignatelli, responsable del Canal Imperial le pide que haga los tres retablos de la iglesia que había construido para los trabajadores del canal. Los bocetos están repartidos en Madrid y Buenos Aires.

Y para la Junta del Canal realiza también el retrato de Fernando VII y el del duque de San Carlos que están en el Museo de Zaragoza. Y no sólo eso, también está el retrato de un arzobispo en el Palacio Arzobispal y el retrato de Félix de Azara.