Esta mañana ha comenzado en Huesca la tala de casi cincuenta pinos en mal estado junto al hospital Sagrado Corazón de Jesús. Esta medida se aplica después de que en los últimos años se hayan producido varias caídas de pinos en esta zona para eliminar el riesgo que esto supone. Un estudio técnico determinó que 46, de los 360 ejemplares de pinos de esta zona ajardinada, algunos de más de 15 metros de altura, se encontraban en muy mal estado con el consiguiente peligro para los viandantes y la circulación.
El Ayuntamiento concedió el permiso para su tala y el sector sanitario de Huesca procede desde hoy a realizar esta intervención. Las zonas de actuación están señalizadas y el acceso al hospital sólo se verá afectado de manera puntual, aunque contará con una entrada y salida alternativa. La Policía Local estará durante todo este tiempo vigilante para señalizar el paso, tal y como indicaba José Miguel Veintemilla, concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Huesca.
Los pinos que se van a eliminar no están incluidos en el catálogo de arbolado singular de la ciudad y su tala llevará aparejada una reposición, en una fase posterior. Además, se va a realizar un seguimiento del resto de árboles que se mantienen en este pinar. Del resto de zonas arboladas, el Ayuntamiento de Huesca señala el pinar del Cerro de San Jorge como la próxima zona a intervenir ya que también presenta numerosos ejemplares de riesgo, algunos envejecidos. No preocupa su estado pero será la zona que propondrán al Gobierno de Aragón para acometer un plan de reforestación tal y como anunció el presidente Jorge Azcón. Además, el consistorio vigila de manera especial el Parque Miguel Servet que cierra al tránsito siempre que haya rachas de viento superior a los 50km por hora. En este sentido, Veintemilla ha pedido respetar ese cierre y evitar riesgos innecesarios.