A punto de cumplir 80 años, el Mercado San Vicente de Paúl, arranca este miércoles el programa piloto con el que el Ayuntamiento de Zaragoza que pretende generar un impacto positivo en las ventas de los detallistas de esta instalación, fomentar el reencuentro con
los vecinos y clientes del barrio y abrirse al resto de la ciudad.
El consejero de Economía del Ayuntamiento, Carlos Gimeno, ha explicado que nueve entidades, incluido el Gobierno de Aragón, colaboran en esta iniciativa que pretender poner de relieve el valor social de los mercados de barrio, que, además, contribuyen a fomentar la salud de los ciudadanos comercializando productos de proximidad.
La primera actividad tendrá lugar este miércoles con el Mercado Agroalimentario, en el que, desde la comarca Comunidad de Calatayud ofrecerán degustación de mermeladas La Vicora, del municipio de Sediles. El viernes, en la Despensa Aragón Alimentos Nobles se desarrollará una jornada de la trufa negra para consumidores; y el sábado, la fotógrafa Vanessa Cañadas y la ilustradora Andrea Ballestín expondrán su obra en el mercado de artesanía, donde se citan los comercios de Made In Zaragoza, artistas y artesanos del sector de la alimentación.
