El Ayuntamiento de Huesca lleva a cabo de forma subsidiaria trabajos para consolidar la estructura de los números 14 y 16 de la calle de San Orencio y evitar el colapso del edificio. De ello se encarga una empresa a la que se le adjudicaron las obras por algo más de 41.000 euros, dinero que posteriormente se repercutirán en la propiedad.
Según el proyecto de ejecución, “la situación general de ambos inmuebles es de abandono total, con acumulación de escombros, excrementos de palomas y aves muertas y otros excrementos posiblemente humanos”. Ambos inmuebles, que comparten acceso general, pero son dos edificios independientes, tienen varias zonas en ruina inminente, tanto escaleras como algunos forjados.
Los trabajos consisten en establecer medidas de apeo o de apuntalamiento de la estructura, “mediante la creación de un armazón o estructura anexa a la existente”. Se ha vallado la zona y se aplicarán mallas o redes que impidan la entrada de aves. La intervención incluye también la demolición de partes, zonas o estructuras que sea necesario eliminar para garantizar la estabilidad de los edificios.
Hay que recordar que, para realizar esta intervención, el Consistorio tuvo que esperar a una orden judicial de desalojo que permitiera ejecutar subsidiariamente estas obras. Además, en octubre se procedió al desalojo de una familia que mantenía okupada una parte de la finca del número 16.