A finales de 2023 les hablábamos de los brotes de sarampión que estaban dándose en Europa. En principio en España y, gracias a la vacunación, parecía que se estaba esquivando el aumento de casos. Salud Pública del Gobierno de Aragón confirmaba un caso autóctono de sarampión en un hombre que vive en la provincia de Zaragoza y que no había viajado durante el periodo de incubación. Esta persona estuvo en aislamiento durante el tiempo que se consideró que podía contagiar la enfermedad y se ha localizado a todos sus contactos.
Fernando Moraga-Llop, portavoz y vocal sénior de la Asociación Española de Vacunología, explica que los casos de sarampión en adultos son raros porque quienes nacieron antes de 1970, muchos han pasado la enfermedad y, a partir de 1981 comenzó la vacunación y el virus del sarampión dejó de circular ya que se mantenía una cobertura, en torno al 95% con la dos dosis de la vacuna que recibían todas las personas.
Las dos dosis de la vacuna contra el sarampión se inoculan con la triple vírica que se pone a los niños a los 12 meses y a los 3 años. En Aragón, la cobertura media es del 97%. Precisamente, el doctor Moraga Llop, recuerda que la disminución de la cobertura vacunal en algunos países europeos provocó que, en 2023, la Organización Mundial de la Salud diera una alerta porque se detectaron en torno a 50.000 casos en país en los que había bajado la incidencia como Rusia, Rumanía o Reino Unido.
La importancia de la vacuna
El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas que se pueden controlar con la vacunación. Por cada persona que tiene el sarampión, puede contagiar hasta a 18 personas. Fernando Moraga Llop explica que la vacuna del sarampión es una vacuna segura y muy efectiva, algo que no ocurre, por ejemplo, con la de la tosferina. En este caso, la vacuna es segura, pero no tiene tanta efectividad.
El sarampión puede padecerse a cualquier edad y en cada edad afecta de diferente forma, teniendo consecuencias que van desde afecciones pulmonares hasta neurológicas.