El inicio de la tercera fase de las obras de reurbanización del paseo de Ramón y Cajal provocará diferentes afecciones a partir del próximo lunes. Los trabajos se llevarán a cabo desde la confluencia del paseo Ramón y Cajal con el Coso Bajo y la plaza Unidad Nacional hasta la calle Camila Gracia. Durante las obras, cuyo plazo de ejecución es de ocho meses, el paseo NO se cortará al tráfico. Ahora bien, en función de las necesidades de la obra la circulación se reconducirá por los carriles centrales o por los laterales.
A partir del lunes 17 de enero, los dos carriles centrales de circulación del paseo estarán cortados al tráfico, por lo que los vehículos tendrán que utilizar las calzadas laterales. Por ello se recomienda a los oscenses que, en la medida de lo posible y para evitar atascos, intenten utilizar vías alternativas a Ramón y Cajal.
En cuanto a los aparcamientos y a las zonas de carga y descarga, las modificaciones que se lleven a cabo en cada momento como consecuencia de las necesidades de las obras estarán correctamente señalizadas. Las paradas de autobús urbano de la plaza Santo Domingo quedarán suspendidas y se instalarán nuevas paradas en la ronda Agustinos. El recorrido de las líneas Circular 1, Circular 2 y Circular 3 cambiará durante las obras. Al llegar a la plaza de toros, los autobuses se desviarán por la ronda Agustinos, ronda Misericordia y paseo Lucas Mallada para incorporarse posteriormente a su recorrido habitual en Ramón y Cajal. En sentido contrario el desvío se hará por las mismas vías de circulación.
En total se va realizar una actuación de cerca de 4.000 metros cuadros en los que también se han mejorado servicios como el abastecimiento de agua, la red de saneamiento, la renovación de la red de recogida de pluviales o la instalación de luminarias led. Este nuevo tramo del paseo Ramón y Cajal contará con dos carriles de circulación de tres metros cada uno, aceras de unos diez metros en ambos lados de la vía, zonas verdes, zonas infantiles, un nuevo kiosco de prensa y carril bici.