Alrededor de 60 personas voluntarias de Cruz Roja van a estar velando y protegiendo a oscenses y visitantes durante las fiestas de San Lorenzo 2023. Se trata de los dispositivos de riesgo previsible (actos festivos y taurinos) que, un año más, Cruz Roja ha preparado de acuerdo con el Ayuntamiento de Huesca con el objetivo de que las próximas fiestas discurran con seguridad y tranquilidad.
El personal voluntario está conformado por profesionales técnicos en emergencias sanitarias (TES), enfermería, medicina, socorristas, albergue y comunicaciones. Todo un despliegue perfectamente coordinado para que la intervención sea eficaz en todo momento. Prácticamente todo el voluntariado es oscense y de asambleas comarcales de la provincia y algunos puntos de Aragón. Se trata de equipos estructurados y con amplia experiencia en situaciones de riesgos y emergencias.
Un hospital de campaña, ambulancias (todas ellas con personal de enfermería y TES) y puestos de socorro se podrán ver junto a cualquier punto donde haya concentración de gente desde el momento del chupinazo hasta la traca final, tanto en los danzantes, las ferias, los fuegos, verbenas, actos infantiles como en deportivos y taurinos, casi las 24 horas del día.
El mayor énfasis se pondrá en la jornada del 9 de agosto y de modo especial en la plaza de la Catedral, con motivo el chupinazo, donde se concentran miles de personas para ser partícipes del estallido de la fiesta. Por esa zona habrá dos ambulancias y el hospital de campaña se situará en la travesía de Ballesteros. También se extremarán las medias durante el fin de semana cuando se prevé mayor afluencia de visitantes.
El año pasado, las fiestas de San Lorenzo se saldaron con 132 personas atendidas, de las que 41 tuvieron que ser trasladadas al hospital. El día 9 fue el que registro más intervenciones, con 54.