La bronca política ha llegado con la comparecencia del presidente del Gobierno aragonés, Jorge Azcón, a petición propia, para hablar de los supuestos casos de corrupción que afectan al Partido Socialista. El responsable de la Comunidad Autónoma cree que estamos en el momento de mayor involución de la democracia y ha puesto como ejemplo la decisión del Tribunal Constitucional que ha avalado hoy la ley de amnistía para los políticos catalanes que impulsaron el proceso de independencia.
El Ejecutivo aragonés ha pedido al Gobierno de España y a la Confederación del Ebro que tenga en cuenta las necesidades de los regantes y ciudadanos en la planificación hidrológica del periodo 2028-2033. El ejecutivo ha presentado alegaciones a los documentos iniciales del futuro nuevo Plan de Cuenca, porque contemplan una reducción de las dotaciones de agua de entre el 12 y el 15%, lo que pone en jaque la ampliación de regadíos y el futuro del sector agrícola y ganadero.
Las empresas aragonesas afrontan de nuevo con incertidumbre el conflicto geopolítico en Oriente Medio entre Irán e Israel, que podría volver a bloquear el suministro de materias primas. También cautela por la amenaza de Donald Trump ante la negativa de España a destinar el 5% del PIB a defensa como ha exigido la OTAN, que podría materializarse en nuevos aranceles.
