Buena parte de los aragoneses se van a contagiar en esta séptima ola. La incidencia supera los 5.700 casos, y los expertos prevén que el pico de hospitalizaciones se alcance dentro de unos diez días, y a finales de mes, en las Unidades de Cuidados Intensivos.
Los ciudadanos celebran que por fin el Gobierno fije un precio máximo para los test de antígenos, que cobran cada vez mayor importancia en el control de positivos, y la patronal y el Gobierno aragonés se han reunido para tratar el impacto del aumento de bajas laborales. Plantean dar las bajas y altas a la vez para reducir la carga de trabajo en Atención Primaria.