Marbella podría estar viviendo un “revival”, si me permiten el anglicismo, de aquella época considerada por muchos como la de la consolidación del turismo a nivel internacional, la de los años 80, la de la llegada en masa de aquel turista de oriente medio de alta calidad, con clase, que era tan común verano tras verano.
Llegan muy buenas sensaciones del pequeño país del Golfo Pérsico de donde acaba de volver una delegación de la ciudad que ha estado algo más de una semana, en una de esas llamadas “misiones comerciales”. Es como una segunda casa, ha dicho la directora general de Turismo del Ayuntamiento, por la naturalidad con la que se refieren a Marbella.
Y ahora además podrían incluso contribuir a romper la estacionalidad. Esto es distinto a aquella época. Entonces, como la mayoría, sólo venían en verano. A tenor por las operaciones inmobiliarias, en los próximos meses o años se extenderán las visitas, en forma de turismo residencial.
No parece tan difícil.