Sus principales caballos de batalla: el depósito de basuras, la ocupación de terrazas y el ruido.
Los socialistas exigen que el equipo de gobierno actúe de manera preventiva, y no sólo cuando se interpone una denuncia vecinal. Del mismo modo pide mediciones de contaminación, el control de ocupación de las terrazas de hostelería y bares de copas, así como el correcto depósito de basura orgánica dentro de los contenedores para evitar plagas de cucarachas y ratas.