Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un varón de 58 años de origen español como presunto responsable de un delito de acoso contra la empleada de un establecimiento de alimentación situado en el centro de la ciudad a la que habría sometido a llamadas y correos electrónicos a cualquier hora del día o de la noche en los que la insultaba o le hacía ofrecimientos sexuales, que le produjeron un estado de ansiedad continuo.
La investigación se inició a partir de una denuncia interpuesta por una mujer en la que manifestó haber estado recibiendo correos electrónicos y llamadas en su teléfono a cualquier hora del día y de la noche por parte de un hombre al que conoció por acudir como cliente a un establecimiento de alimentación en el que trabaja situado en el centro de Granada. La víctima aportó como prueba para su análisis una serie de correos electrónicos que este varón le habría enviado en los que la insultaba y la amenazaba, que le habrían hecho temer por su integridad física.
Según los datos de la investigación el detenido pretendía entablar una relación sentimental con la víctima y ante su negativa habría realizado la conducta ilícita denominada stalking o acoso.
Este hombre ya la había acosado en 2018, cuando, tras ser detenido, se le impuso una medida judicial de alejamiento e incomunicación respecto de la denunciante. A pesar de que los agentes han tenido conocimiento de la reincidencia del presunto acosador en el mes de junio del presente año, el primer correo que volvió a enviar a la víctima, en este caso con un insulto, tuvo lugar en el mes de enero de 2020.
Insultos y amenazas
Los agentes han llevado a cabo una nueva investigación en la que han analizado las pruebas aportadas como han sido los correos electrónicos que le habría enviado y han obtenido indicios que apuntan a que nuevamente este hombre, que ahora cuenta con 58 años, sería el presunto autor del nuevo acoso consistente en insultos y amenazas por no haber accedido a mantener una relación sentimental.
Finalmente el investigado ha resultado arrestado como presunto responsable de un delito de acoso y ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.
Ante el acoso, denuncia
El acosador, puede ser hombre o mujer, persigue de forma obsesiva a la víctima, la espía, la sigue por la calle, la llama por teléfono constantemente, la envía regalos, la manda cartas o sms, escribe su nombre en lugares públicos y, en casos extremos, llega a amenazarla y a cometer actos violentos contra ella. La recomendación de la Policía Nacional es que cualquier persona que se sienta acosada debe denunciar la situación.