No sorprende, o tan sólo un poco, que EH Bildu haya tomado la decisión de esconder a Pello Otxandiano, de evitar que dé entrevistas a todos los medios de comunicación, como sí lo están haciendo el resto de candidatos.
Por un lado, "blanquean" al aspirante a lehendakari, del que algunos insinúan que incluso le han puesto gafas desde el día después a ser el elegido para aparentar un aspecto de profesor e intelectual capacitado para dirigir los designios del País Vasco.
Por otro, claro está, evitan que Otxandiano trague el sapo de responder sobre ETA y utilice eufemismos o veleidades como hacernos creer que la banda terrorista fue un "grupo armado" del que hay que ocultar que asesinara a 853 personas. Seguro que a mi admirado Carlos Alsina, a golpe de repregunta, no le dura un asalto.
El candidato del PNV a lehendakari, Imanol Pradales, ha reiterado su disposición a "liderar un gran acuerdo" en favor de la Sanidad Vasca con el fin de reforzar Osakidetza. El portavoz adjunto de EH Bildu en el Congreso, Oskar Matute, ha reiterado la necesidad de un fondo público de inversión y ha denunciado "la desidia" del Gobierno vasco, al que acusa de ser "cómplice" de la pérdida de Euskaltel, Gamesa e Ibermática.
La socialista, Aroa Jilete, ha asegurado que su partido va "a fomentar el desarrollo de un nuevo servicio de Cercanías de Altsasu a Miranda que complemente los servicios de transporte interurbanos" en Álava. Y si alguien se arropó, no con uno, sino con cinco mandatarios de Comunidades Autónomas, fue el popular Javier de Andrés. En el mitin de Bilbao participaron los presidentes de Castilla-León, Murcia, Galicia y Baleares, además de una representante de Ceuta.
Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, se ha preguntado en Álava donde está la sorpresa porque Pello Otxandiano, dice, es el portavoz de ETA.