España logró una ventaja de tres goles a falta de 6:27 minutos para el final del partido, siendo la máxima diferencia del choque. Pero, en vez de romperse, las griegas lograron un parcial de 0-3 para igualar el marcador.
Cuando parecía que las muchas veces llamada 'final de consolación' se iba a los penaltis, España logró hacerse con el bronce en una jugada loca, con Grecia atacando con portera-jugadora pero cometiendo contrafalta.
Tras un primer intento fallido de Judith Forca de tirar a puerta vacía (le hicieron falta, posible penalti), Elena Ruiz se hizo con la bola salvadora, la que le valió para marcar desde lejos y permitir a España subir al podio de Doha 2024 como tercer mejor equipo del mundo, en el primer bronce mundialista de la historia para las 'Guerreras del Agua'.