Los hermanos Márquez Alentá tardarán en olvidar este fin de semana en Tailandia. Después de tres años muy complicados para Marc Márquez, en el que ha tenido que soportar cuatro operaciones que estuvieron a punto de finalizar la carrera deportiva del piloto de Cervera, tuvo que abandonar su marca de toda la vida y competir la temporada pasada con una moto del año 2023 y fuera de un equipo oficial, con la intención de analizarse y ver si algún día volvería a ser el Marc Márquez de antes.
A la vista está que lo ha conseguido ya que ha logrado estar en el equipo oficial de Ducati y en la primera carrera ha demostrado que vuelve a tener las sensaciones de los primeros años en MotoGP, donde logró batir todas las estadísticas. Sencillamente es el mejor piloto, con la mejor moto y enrolado en el mejor equipo de la actualidad. Ha igualado el número de podios de Dani Pedrosa y está a una victoria de Ángel Nieto, por lo que si hay que apostar, no cabe dudas de que este año hay que hacerlo a “todo al rojo”.

Pero la emoción de Marc no ha sido solo por sus resultados y las lágrimas que en algún momento se le han escapado eran también por el gran resultado de su hermano Álex y por todo lo que ha pasado junto a su entorno más cercano, destacando sus padres.
Sólo ellos saben lo que Marc ha sufrido y el ver que los dos hermanos están primero y segundo, aunque sea en el primer Gran Premio de la temporada es algo al alcance de muy pocos en cualquier deporte, por lo que ambos tardarán en olvidarlo. Álex ha demostrado ser un piloto muy inteligente ya que sabe perfectamente que no tiene el talento de su hermano, pero a base de dar los pasos adecuados y aprovechar las oportunidades, es Campeón del Mundo de Moto3 y Moto2 y este año cuenta con una Ducati 2024, una moto muy competitiva y que es prácticamente igual a la de este año, por lo que puede poner en serios aprietos a cualquier piloto que aspire al título.
Por mucho que diga que es prácticamente imposible lograr el campeonato, Álex cuenta ya con una amplia experiencia en la categoría y cualquier error de otros pilotos lo puede aprovechar muy bien. Creo que no hay duda de que en muchas carreras estará luchando por el podio, por lo que podemos ver a los dos hermanos en el podio al final de año.
Además, el primer fin de semana de la temporada ha dejado varias conclusiones. La primera es que Honda parece que ha dado un paso adelante, con Mir llegando a estar séptimo en la clasificación antes de la caída, aunque aún les falta para luchar por el podio, al igual que Yamaha y KTM, con un Pedro Acosta siendo capaz de ir rápido, pero que una vez más ha terminado en el suelo. Sorprendente el fin de semana de Ogura, que ha terminado cuarto, estando muy cerca de los pilotos del podio.
Y de lo que no cabe ninguna duda es que una vez más, España es el país con los mejores pilotos del campeonato. Primer fin de semana y primer triplete, con la victoria de José Antonio Rueda en Moto3, seguido de Álvaro Carpe y Adrián Fernández, que junto a la victoria en Moto2 de Manuel González, seguido de Aron Canet demuestra el gran trabajo que se está haciendo desde las federaciones autonómicas y la española. Somos la envidia del mundo y esto no ha hecho nada más que empezar.